Tratar de ver el lado positivo
¿Qué es ver
el lado positivo?
¿Ver todo con otro color?
¿Con más optimismo?
¿O poder
encontrar soluciones, respuestas a temas importantes?
Es difícil de
contestar, porque pueden ser una o más las respuestas.
Este ha sido
un año atípico, desde el clima que nos ha estado castigando al planeta por
entero, al incremento de la agresividad del ser humano, unos contra otros.
¿Porque hay
tanto enojo y tanta intolerancia?
Muchas veces
pienso que el hombre que tiene entre sus manos tanta tecnología, que se ha
avanzado en la ciencia, en la física; en lugar de unirse y tratar de mejorar,
se vuelve cada vez más ermitaño, y se separa del resto.
Observen
bien, cuando viajan en un ómnibus o van a un shopping, o simplemente están en
una plaza de la ciudad, cada persona está aislada del resto del mundo, con
auriculares, o mirando su celular o su Tablet, en el mejor de los casos.
Tal vez por allí levantan la vista para
mirar, a su alrededor o a la nada.
¿Es que esta
nuestra actual sociedad o civilización se está volviendo en cierto modo
autista?
Por suerte
para todos nosotros todavía hay quienes, nos regalan con su música o su
pintura, o el baile, disciplinas que hacen vibrar con sus sonidos y sus
colores.
Si yo sé que
son muchas preguntas, pero como cada fin de año nos proponemos cambios para el próximo,
y tal vez este nos tengamos que fijar como meta, crecer como seres humanos,
verdaderamente solidarios, poder mirarnos a los ojos, y unir nuestras manos
para caminar juntos.
No por una
orientación política, ni filosófica o religiosa sino simplemente humana.
Y que nuestra
mirada comience a ver realmente el lado positivo a las cosas.
Hace poco
recordé algo que aprendí hace ya mucho con mi maestra de yoga, el solo hecho de
respirar tiene que producir alegría, significa que estamos vivos, aquí, ahora.
Es el milagro
de la vida que está en cada uno de nosotros.
Poder mirar hacia el cielo, ver las estrellas
relucir en sus destellos, la arquitectura de la cuidad más arriba de nuestros ojos,
o como las ramas de los árboles en lo alto se unen y forman una especie de
encaje bordado de color verde.
Disfrutar de
la tibieza del sol y lo refrescante de la brisa, y por qué no las gotas de
lluvia que nos mojan en los días de verano.
Es solo un cambio
en la mirada, es solo dejar por un momento esa rutina que nos atrapa y ver lo
luminoso de nuestra vida con risas y llantos, simplemente sentir y lo más
importante simplemente vivir.
Es entonces
para todos aquellos que nos leen que les deseo un muy buen comienzo de
año, por un momento dejen de lado sus
pre- ocupaciones y comiencen a ver el lado positivo del estar en este
maravilloso planeta azul.
Hasta pronto
y gracias
TF. MARIA ELENA VANAGAITIS
Montevideo, diciembre de 2017