LA FERTILIZACIÓN ASISTIDA
Estamos comenzando un nuevo año, algo convulsionado a
nivel mundial, con algunos desastres naturales, e incremento de la violencia
del hombre contra el hombre además de hacerlo también contra la naturaleza.
Terremotos, lluvias e inundaciones, han conmovido al mundo, atentados, en fin,
un incremento de la intolerancia.
En nuestro país en este año pasado, se ha tomado una decisión
positiva, la de que muchas parejas que tienen dificultades en la concepción, y
que económicamente no puedan sustentar ese largo tratamiento puedan hoy
acercarse a esa posibilidad.
El tema de tener hijos o un hijo, como sea, a veces no
es tan fácil, como todos piensan, porque hay parejas que por causas diferentes
no lo pueden lograr.
Muchas veces hay una demora en hacer los estudios
necesarios para luego hacer el tratamiento debido, desde que se forma la pareja
y el tiempo de que lleva intentar quedar embarazados.
Por otro lado a los que están atravesando por esa
situación, se les somete a una gran presión, desde su entorno, porque todos
están impacientes de ver que tengan un niño.
Es así que la pareja prefiere en muchos casos no
hablar de ese tema.
La mujer se siente discriminada por no ser madre, y no
poder participar en los diálogos con sus pares que sí lo son. Nadie entiende
por la situación que están pasando.
Hay un conjunto de emociones que se mueven alrededor
de todo esto, primero a tomar la decisión de comenzar con un tratamiento que
tiene la incertidumbre de si se va a llegar a concretar o no su deseo de ser
madre, y luego el temor de cómo serán recibidos los resultados.
Son tratamientos largos, que muchas veces se deben
repetir, donde tanto la mujer como el hombre tienen que hacerse una serie de
estudios y están sometidos a un gran estrés.
Juegan mucho aquí la aceptación y la paciencia, y la
esperanza de que se va a llegar a lograr después de todo, a tener una familia más
grande.
Se hace una estimulación hormonal, para incrementar el
número de folículos, en la mujer, y un seguimiento de los mismos.
Y determinaran el método en que se hará la
reproducción asistida.
Todo puede terminar en una gran alegría, o en un duelo
por no haberlo logrado, una o más veces.
Y los tiempos corren, van rápido, y los años pasan.
En muchas aquellas mujeres que han pasado
anteriormente por situaciones como estas y no han podido ser madres, les ha quedado
una gran experiencia, y han visto como ha progresado este tipo de tratamientos
en la actualidad.
Algunas con sentimientos de frustración ya superados,
otras tal vez no.
En mi trabajo como terapeuta he podido acompañar en alguno que otro
caso este tipo de situación, con los elementos que yo manejo que son las
esencias florales, y que es bueno tenerlas en cuenta en este tipo de procesos,
en que se necesita mucha contención emocional, y que aquello que se le pueda
dar no provoque efectos secundarios de ningún tipo.
Sino que trabajar las intolerancias, la paciencia y la
aceptación son muy importantes, así como mantener la alegría por la vida,
avanzar sin miedos, superando el dolor.
Terminar así el año también es muy bueno, ya que la
esperanza se instalara en muchas parejas, y tal vez muchos niños vendrán a este
mundo tan convulsionado para provocar grandes cambios y llenarlo de paz, bondad
y amor, y mucha alegría, esa alegría contagiosa que trae cada nuevo ser que
llega.
Que todos tengamos entonces un buen comienzo para este año 2016, y lo recibamos con un gran abrazo amoroso y fraterno.
Tpta. Floral Maria
Elena Vanagaitis